El Departamento de Defensa de Estados Unidos confirmó este lunes que la base aérea de Al Udeid, ubicada en las afueras de Doha, Catar, fue blanco de un ataque con misiles por parte de Irán. Según informó un funcionario del Pentágono, no se han registrado bajas entre el personal militar estadounidense hasta el momento.
El ataque, en represalia por los bombardeos estadounidenses sobre instalaciones nucleares iraníes el pasado fin de semana, fue ejecutado por la Guardia Revolucionaria iraní e incluyó el uso de misiles balísticos de corto y medio alcance, además de misiles de crucero, según reportes de medios estadounidenses.
La base de Al Udeid, que alberga a unos 10.000 efectivos y constituye el mayor centro militar estadounidense en Oriente Medio, ya había sido parcialmente evacuada como medida preventiva.
Simultáneamente, Irán confirmó haber atacado también bases estadounidenses en Irak, incluyendo Al Asad y Erbil, en una ofensiva coordinada en respuesta a la operación ‘Midnight Hammer’, que impactó las instalaciones nucleares de Isfahán, Natanz y Fordo.
La embajada de EE.UU. en Catar emitió una alerta de seguridad para sus ciudadanos, instándolos a permanecer en sus hogares hasta nuevo aviso.
La tensión regional sigue en aumento. El Parlamento iraní ha solicitado formalmente el cierre del estrecho de Ormuz, una vía estratégica para el comercio global de crudo. Sin embargo, esta decisión deberá ser evaluada y aprobada por el Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán.
