A partir del 1 de enero de 2025, Ucrania ha cortado el suministro de gas natural ruso a través de su territorio, tal como lo había anunciado en días previos. Esta medida se produjo con la expiración del Acuerdo de Interacción entre el operador gasístico ucraniano GTSOU y Gazprom, firmado en 2019, que regía el transporte de gas entre ambos países.
Según un comunicado del operador ucraniano, el acuerdo expiró a las 7 de la mañana, hora de Kiev, y con ello se detuvo el tránsito de gas desde el punto de entrada de Sudzha, en la frontera oriental de Ucrania, hacia los puntos de salida en las fronteras occidental y meridional.
A partir de esa fecha, el sistema de transporte de gas de Ucrania opera sin tránsito de gas ruso, y la infraestructura fue ajustada para garantizar un suministro estable de gas para los consumidores ucranianos.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, calificó esta medida como “una de las mayores derrotas de Moscú”, en un claro rechazo a la dependencia energética rusa.
