Antes de asistir este domingo al funeral del activista conservador Charlie Kirk, el expresidente de EE. UU. Donald Trump aseguró que “ayudaría” a defender a Polonia y los países bálticos si Rusia continúa intensificando sus acciones militares en Europa.
La declaración llega en un momento de fuerte tensión, luego de que Rusia violara durante 12 minutos el espacio aéreo de la OTAN sobre Estonia, lo que llevó a Tallin a invocar el Artículo 4 de la Alianza Atlántica y solicitar una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU, programada para este 22 de septiembre.
Los incidentes recientes también incluyen la incursión de 19 drones rusos en Polonia hace apenas una semana y media, lo que llevó a Varsovia a emitir una protesta formal.
Varios países europeos han reclamado una respuesta más firme:
- El presidente checo Petr Pavel pidió considerar el derribo de aviones rusos que violen fronteras aliadas.
- La ministra lituana de Defensa, Dovilė Sakalienė, sugirió adoptar medidas similares con drones, recordando que Turquía derribó un Su-24 ruso en 2015.
- El ministro de Defensa de Polonia advirtió desde Podkarpackie que “la OTAN debe responder con mucha firmeza a las amenazas rusas”.
La creciente presión sobre la Alianza refleja la preocupación por una posible escalada que, de extenderse, pondría a prueba la unidad y capacidad de disuasión de la OTAN frente a Moscú.
