El festival de música electrónica Tomorrowland inició este viernes, tan solo dos días después de que un incendio destruyera por completo su emblemático escenario principal. A pesar del siniestro, el evento —uno de los más importantes del verano europeo— abrió sus puertas gracias a un operativo de emergencia que permitió la instalación de una nueva tarima.
La banda australiana NERVO inauguró el festival al grito de “¡Lo hemos conseguido!”, celebrando la apertura en el escenario sustituto, aún con restos carbonizados del original visibles en el fondo. La causa del incendio, ocurrido el miércoles por la noche, continúa bajo investigación. Afortunadamente, no se reportaron heridos.
Montaje exprés y espíritu de resiliencia
Según los organizadores, el equipo técnico trabajó sin descanso durante la noche del jueves para desmontar los escombros y levantar una nueva estructura a tiempo para el inicio del evento. El resultado fue un escenario más íntimo, equipado con altavoces previamente utilizados en conciertos de Metallica.
“Puede que haya unos pocos que pidan reembolso, pero la gran mayoría sigue viniendo. La esencia de Tomorrowland es la unidad, las buenas vibras y la energía colectiva”, explicó Debby Wilmsen, portavoz del festival.
Asistencia masiva pese al incidente
El evento se celebra en las afueras de Boom, Bélgica, y reúne a cerca de 400.000 personas durante el fin de semana. Solo el viernes, unas 38.000 personas acampaban ya en el recinto.
Entre los asistentes, el entusiasmo fue mayor que el desaliento. Zak Hiscock y Brooke Antoniou, visitantes australianos, expresaron su preocupación inicial al conocer el incendio, pero celebraron que el festival haya podido continuar. “Habíamos viajado muy lejos para estar aquí. Es un sueño”, dijeron.
El ucraniano Oleksandr Beshkynskyi compartió el mismo sentimiento: “Esto no se trata solo de uno o dos DJ. Es el ambiente, es la experiencia completa lo que hace que el sueño siga vivo”.