El papa León XIV volvió a levantar la voz contra los conflictos armados y pidió este domingo un compromiso real de los gobernantes para alcanzar la paz en Tierra Santa y Ucrania. Durante la ceremonia de canonización de los jóvenes italianos Pier Giorgio Frassati y Carlo Acutis, celebrada ante unas 80.000 personas en la Plaza de San Pedro, el pontífice advirtió que “las aparentes victorias logradas con las armas sembrando muerte y destrucción son en realidad derrotas y nunca traen paz ni seguridad”.
“Encomendamos nuestra constante oración por la paz a la intercesión de los santos y de la Virgen María, especialmente en Tierra Santa y en Ucrania y en cualquier otra tierra ensangrentada por las guerras”, expresó antes del rezo del ángelus.
A los líderes políticos les instó a “escuchar con conciencia” y a poner fin a la espiral del odio: “Dios sostiene a quienes se comprometen a seguir el camino del diálogo”.
La Santa Sede ha reiterado en varias ocasiones su preocupación por los escenarios de guerra. El secretario de Estado Vaticano, Pietro Parolin, recordó recientemente que en Gaza cientos de civiles, entre ellos personas con discapacidad, permanecen refugiados en una parroquia sin poder ser evacuados. “Esperamos que se respete a quienes han decidido quedarse allí y no tienen otra opción”, subrayó.
Respecto a Ucrania, Parolin insistió en que la posición del Vaticano sigue siendo la misma: abrir canales de diálogo como única vía hacia la paz.