La trama de corrupción que involucra al exministro José Luis Ábalos, su exasesor Koldo García y al exsecretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, ha destapado una red que amenaza con dañar no solo la imagen del partido, sino también la estabilidad del Gobierno.
¿Qué se sabe hasta ahora?
La investigación del juez de la Audiencia Nacional Leopoldo Puente, respaldada por informes de la Guardia Civil, apunta a una presunta red de comisiones ilegales y adjudicaciones públicas amañadas. Las primeras líneas de esta trama surgieron en torno a los contratos de mascarillas durante la pandemia, pero el caso ha crecido y ahora alcanza obras públicas y supuestas luchas de poder dentro del propio PSOE.
- José Luis Ábalos ha declarado que fue “utilizado” tanto por Koldo García como por Santos Cerdán, deslindando responsabilidades.
- Santos Cerdán, hasta hace poco número tres del PSOE, asegura que no denunció la trama por “error”, pero niega haber participado en ella. En su entorno sostienen que se ha “malinterpretado” su papel.
- Koldo García, epicentro de la red, es señalado como el operador clave en las negociaciones opacas.
¿Qué falta por conocer?
El juez aún espera varios informes clave de la Guardia Civil que podrían aclarar —o complicar— el caso:
- Un análisis patrimonial completo de Ábalos y Cerdán.
- El cruce de comunicaciones entre los implicados y otros dirigentes del PSOE.
- Revisión de adjudicaciones amañadas, mencionadas por el empresario Víctor de Aldama.
- El estudio del material incautado en recientes registros domiciliarios y de oficinas.
Impacto político
El escándalo no solo compromete figuras clave del socialismo, sino que revela fracturas internas. Cerdán, desde su posición de poder en el aparato del partido, habría impulsado purgas contra figuras como Adriana Lastra, según algunas voces dentro del PSOE. La gestión del caso reabre heridas internas y erosiona la autoridad de la cúpula actual.
Además, la onda expansiva llega hasta Sumar y otros socios de investidura, afectando la ya frágil mayoría parlamentaria del Gobierno. La derecha, por su parte, aprovecha el contexto para exigir responsabilidades políticas inmediatas.
El tablero judicial y político se mueve
Mientras el PSOE intenta contener los daños, el caso sigue avanzando en los tribunales. El desenlace dependerá del contenido de los informes pendientes y de las decisiones del juez Puente en las próximas semanas. La pregunta ya no es si habrá consecuencias, sino hasta dónde llegarán.
