Bruselas.- La Unión Europea ha determinado, en una revisión interna del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), que Israel ha incurrido en violaciones de derechos humanos en la Franja de Gaza, incumpliendo el artículo 2 del Acuerdo de Asociación que sostiene con el bloque. Esta conclusión, basada en informes de organizaciones internacionales independientes, marca un giro significativo en la postura comunitaria ante la guerra en curso.
Según el informe enviado de manera restringida a los Estados miembros para evitar filtraciones, las acciones israelíes en Gaza han impedido la entrega efectiva de ayuda humanitaria, agravando la situación de hambruna en el enclave. Además, se señala la ocupación ilegal de asentamientos en Cisjordania, así como la violencia por parte de colonos israelíes contra la población palestina residente.
"Hay indicios de que Israel estaría incumpliendo sus obligaciones en materia de derechos humanos", declaró un alto diplomático europeo, refiriéndose al artículo 2 del acuerdo, que condiciona las relaciones bilaterales al respeto de los derechos humanos y principios democráticos.
La revisión fue solicitada por 17 países del bloque y será debatida este lunes por los ministros de Asuntos Exteriores. La Alta Representante de la UE para Asuntos Exteriores, Kaja Kallas, abordará el tema nuevamente con los líderes europeos en la cumbre de Bruselas del jueves. Kallas, que ha mostrado recientemente una postura más crítica hacia Israel, expresó esta semana su preocupación: “Cuando oigo que 50 personas han muerto en la cola para conseguir harina, me resulta doloroso, por supuesto, y me pregunto: ¿qué más podemos hacer?”.
Entre las posibles respuestas se evalúa desde la suspensión parcial del acuerdo hasta restricciones en áreas como comercio, tecnología, cultura o diálogo político. Sin embargo, cualquier medida necesitaría una mayoría cualificada o unanimidad entre los Estados miembros, lo que complica la adopción de decisiones inmediatas.
Varios países, como Bélgica, Irlanda, España o Portugal, han intensificado sus llamados a examinar el comercio con productos vinculados a los asentamientos ilegales en territorios ocupados. No obstante, otras naciones del bloque insisten en mantener las vías de comunicación con Tel Aviv, alegando intereses comerciales y estratégicos.
La revisión se produce en un contexto de creciente presión internacional sobre Israel, agravado por la reciente escalada militar con Irán, que también figura en la agenda diplomática del próximo lunes. Mientras tanto, aumenta el debate interno en la UE entre quienes exigen acciones concretas ante la situación humanitaria en Gaza y quienes temen romper completamente los lazos con Israel.
De momento, no se esperan decisiones inmediatas hasta la próxima reunión de ministros de julio, pero el informe podría marcar un precedente en la postura europea sobre el conflicto israelí-palestino y el cumplimiento de los compromisos internacionales en derechos humanos.