El presidente de Argentina, Javier Milei, llega a la crucial elección del próximo 7 de septiembre en medio de una tormenta política, tras verse envuelto en un escándalo de corrupción, ser agredido durante una caravana electoral y sufrir importantes derrotas en el Congreso.
La votación en la capital, principal bastión peronista y distrito clave, se había iniciado con optimismo para el mandatario, pero los últimos acontecimientos han oscurecido la recta final de su campaña. Milei considera esta elección decisiva tanto para intentar derrotar al peronismo como para preparar el terreno para las legislativas nacionales del 26 de octubre.
Denuncias de sobornos en la Agencia Nacional de Discapacidad
El 20 de agosto, medios locales revelaron audios de Diego Spagnuolo, extitular de la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis), que describen un esquema de sobornos en la compra estatal de medicamentos, con la participación de Karina Milei, hermana del presidente, y posible conocimiento del propio Javier Milei. Tras esto, se presentó una denuncia penal y la Justicia inició investigaciones y registros.
Una reciente encuesta de la consultora Trespuntozero indica que la aprobación de Milei cayó siete puntos entre sus votantes, y un 62,5 % de los encuestados consideró graves las denuncias. No obstante, según el analista Julio Burdman, “sus seguidores le siguen siendo fieles, al menos hasta el momento”.