El reconocido compositor Mark Snow, célebre por crear el icónico y escalofriante tema musical de Expediente X, falleció a los 78 años en su residencia de Connecticut, según confirmó la revista Variety. Aunque no se reveló la causa del fallecimiento, la noticia fue divulgada este fin de semana, causando pesar entre fanáticos y colegas del medio audiovisual.
Snow —cuyo nombre real era Martin Fulterman— dejó una profunda huella en la música televisiva, no solo por su trabajo en The X-Files (título original de Expediente X), sino también por su talento para crear atmósferas inolvidables en más de 200 episodios y las dos películas derivadas de la serie. El tema principal, publicado como sencillo en 1996, se convirtió en un fenómeno cultural y fue reconocido por Rolling Stone como uno de los 100 mejores temas de televisión de todos los tiempos.
Una carrera marcada por la versatilidad y la innovación
Formado en la prestigiosa Juilliard School, Snow comenzó a trabajar en televisión en los años 70 y colaboró con figuras como Aaron Spelling en series como Starsky & Hutch, Hart to Hart y T.J. Hooker. También compuso para Millennium, The Lone Gunmen, Smallville, Blue Bloods y The Twilight Zone.
Además, Snow fue pionero en el uso de sintetizadores para crear sonidos ambientales y trabajó con el director Alain Resnais en varias películas, destacándose Cœurs (nominada al César a mejor banda sonora).
Reconocimiento y legado
Con 15 nominaciones al Emmy, Snow fue un referente en su campo durante más de cuatro décadas. Su último trabajo en cine fue la banda sonora de The New Mutants (2020), dentro del universo X-Men.
Le sobreviven su esposa Glynnis, sus tres hijas y varios nietos. Su música, en especial aquel silbido inolvidable que abría cada episodio de Expediente X, seguirá resonando en la memoria de millones de espectadores en todo el mundo.