Eddie Palmieri, el maestro del piano que revolucionó la salsa y el jazz latino con su estilo vanguardista, falleció este miércoles en su hogar de Nueva Jersey tras una larga enfermedad. Tenía 88 años. Su hija Gabriela confirmó la noticia al New York Times, y Fania Records, sello con el que dejó una huella imborrable, anunció su partida.
El primer latino en ganar un Grammy
Palmieri marcó un hito en 1975 al convertirse en el primer latino galardonado con un Grammy por su álbum The Sun of Latin Music. A lo largo de su carrera acumuló ocho Grammys, un Latin Grammy y el prestigioso Premio a la Excelencia Musical de la Academia Latina de la Grabación.
Un genio forjado en El Barrio
Nacido el 15 de diciembre de 1936 en el Spanish Harlem de Nueva York, comenzó su camino musical influenciado por su hermano Charlie Palmieri. Aunque a los 13 años se inclinó por los timbales, regresó al piano a los 15, instrumento que convirtió en su sello característico. “Soy un percusionista frustrado, así que me desquito con el piano”, decía con humor.
Alma de orquesta y corazón de barrio
Con más de 36 producciones discográficas, Palmieri trabajó con leyendas como Nicky Marrero, Cachao, “Chocolate” Armenteros y Bobby Valentín. Brilló como compositor, arreglista y director de orquesta, siendo parte esencial de las Fania All-Stars y Tico All-Stars.
En entrevistas recientes lamentaba la pérdida de sus contemporáneos, grandes pilares de la salsa como Tito Puente, Ray Barreto y Machito: “La calidad de las orquestas que ellos tenían ya no existe”, confesó.
Legado universal
Palmieri también dejó huella como educador y embajador cultural. Fue presentador del programa Caliente en la radio pública estadounidense y en 2010 ingresó a la Galería de Celebridades del Museo Global de Instrumentos Musicales. Su música lo llevó por África del Norte, Asia, Europa, Australia y América Latina, llevando el sabor del Caribe a todos los rincones del mundo.
Se apaga un titán, pero su clave sigue sonando.
