Estados Unidos anunció su disposición a asumir un liderazgo activo en la respuesta hemisférica a la crisis en Haití, pero advirtió que el éxito de cualquier iniciativa dependerá del respaldo de los Estados miembros de la OEA. Así lo expresó una alta funcionaria del Departamento de Estado durante una rueda de prensa virtual previa al inicio de la 55ª Asamblea General de la Organización de Estados Americanos.
“La situación en Haití es grave. Más de un millón de personas han sido desplazadas, muchas de ellas niños, y el pasado año fue el más sangriento registrado”, alertó la vocera.
Washington impulsa una resolución que otorgue a la OEA un papel más dinámico en el apoyo a la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS) y al fortalecimiento de la Policía Nacional Haitiana (PNH), además de promover el uso de la plataforma técnica SECURE-Haiti para canalizar asistencia operativa.
“Estamos dispuestos a asumir un rol de liderazgo, pero este esfuerzo solo será efectivo si cuenta con el respaldo activo de los Estados miembros de la OEA”, subrayó.
Mensaje a la región: “¿De qué lado quieren estar?”
Además del tema haitiano, la vocera estadounidense lanzó un llamado firme a los gobiernos del hemisferio, instándolos a definir su postura frente a regímenes que calificó como “patrocinadores del terrorismo”, en referencia indirecta a Irán y sus vínculos con países como Venezuela, Nicaragua y Bolivia.
“Cada Estado debe preguntarse de qué lado quiere estar: del lado de las democracias o del lado de quienes socavan la paz y la estabilidad regional”, afirmó.
El vicesecretario de Estado, Christopher Landau, encabeza la delegación estadounidense y tiene entre sus objetivos clave construir consensos hemisféricos ante los nuevos desafíos geopolíticos.
La OEA, en el centro del tablero
Estados Unidos considera que el manejo de la crisis haitiana será una prueba clave para la relevancia de la OEA como organismo multilateral.
“Es una tragedia humana de gran escala y una amenaza directa para la estabilidad regional. La OEA debe estar a la altura del desafío”, indicó la funcionaria, quien también destacó que es uno de los pocos foros donde China no ejerce influencia significativa.
Además, EE. UU. reiteró su apoyo a la activista cubana Rosa María Payá, candidata a integrar la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), resaltando su lucha por la democracia y los derechos humanos en la región.
Camino a la Cumbre de las Américas
La Asamblea de Antigua y Barbuda también servirá como antesala para la 10ª Cumbre de las Américas, que se celebrará en diciembre en la República Dominicana. En ese encuentro, Washington buscará avanzar una agenda centrada en democracia, migración, seguridad hemisférica y desarrollo sostenible.
“Es tiempo de actuar. Haití no puede esperar más”, concluyó la vocera.
