El republicano Donald Trump asumió oficialmente su segundo mandato como presidente de EE. UU. el 20 de enero de 2025, iniciando el período 2025-2029 como el 47.º presidente, acompañado por el vicepresidente J.D. Vance en la Rotonda del Capitolio de Washington D.C., en un espacio cerrado debido a las bajas temperaturas. Con ello, dio inicio al período 2025-2029 como el 47º presidente del país.
Entre los invitados nacionales e internacionales asistieron los presidentes de Argentina, Javier Milei; de El Salvador, Nayib Bukele; de Ecuador, Daniel Noboa, y la primera ministra italiana, Giorgia Meloni (la única líder de la UE en la toma de posesión de Trump). Por parte de Venezuela acudió el líder opositor Edmundo González Urrutia, reconocido por Estados Unidos y otros países como presidente electo.
También asistieron los empresarios tecnológicos Elon Musk (Tesla y X), Mark Zuckerberg (Meta), Jeff Bezos (Amazon y The Washington Post), el mexicano Carlos Slim (Claro) y Shou Chew, director ejecutivo de TikTok.
En su discurso inaugural, Donald Trump abordó diversos temas como migración, seguridad fronteriza, economía, inflación, y recursos energéticos. Además, declaró que su política reconocerá únicamente los géneros femenino y masculino, pero organizaciones de salud y expertos afirman que dos géneros no reflejan la realidad biológica y social. Los Institutos Nacionales de la Salud (NIH, por sus siglas en inglés) indican que “la identidad de género de una persona es autoidentificada, puede cambiar a lo largo de su vida y puede o no corresponder a las expectativas culturales de una sociedad en función de sus características sexuales biológicas”. Entre los ejemplos de identidades de género, menciona por ejemplo mujer, hombre, persona trans, género diverso y no binario.
Trump también mencionó que reactivará el programa “Remain in Mexico” (“Permanecer en México”) : “Declararé una emergencia nacional en nuestra frontera sur. Se detendrá inmediatamente toda entrada ilegal y comenzaremos el proceso de devolver a millones y millones de extranjeros criminales a los lugares de donde vinieron, restauraremos mi política de Permanecer en México. Pondré fin a la práctica de captura y liberación, y enviaré tropas a la frontera sur para repeler la desastrosa invasión de nuestro país”.
El programa “Permanecer en México” (MPP, Protocolos de Protección Migratoria) obligaba a los inmigrantes a esperar en México mientras buscaban asilo en EE. UU. hasta su audiencia con un juez de inmigración. Fue implementado por Trump en enero de 2019, pero durante la administración de Joe Biden, la Corte Suprema ordenó su finalización en junio de 2022, citando fallas estructurales y problemas humanitarios, así como su impacto negativo en otros recursos y programas prioritarios, sin abordar las causas fundamentales de la migración irregular.
La aplicación CBP, que permitía a los migrantes programar citas en los puertos de entrada a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México, ya no está operativa desde el 20 de enero de 2025, según un aviso de Aduanas y Protección Fronteriza.
Además aseguró que ganó las elecciones presidenciales del 5 de noviembre de 2024 en todos los swing states (estados péndulo) y con el voto popular de “millones de personas”, y esto es verdadero. Los resultados en los 7 swing states (Arizona, Georgia, Michigan, Nevada, Pensilvania, Carolina del Norte y Wisconsin) fueron favorables para Trump y el candidato republicano ganó el voto popular en el país por un poco más de 2 millones de votos, según los resultados reportados por The Associated Press.
Se les llama swing states o estados péndulo porque en estos estados tanto el Partido Demócrata como el Partido Republicano tienen probabilidades similares de ganar. Esto se debe a que los márgenes de votación entre ambos partidos suelen ser pequeños o porque en elecciones anteriores los partidos han ganado de manera alternada. Estos estados son clave en las elecciones presidenciales debido a su capacidad para definir el resultado final.
Afirmó que el gobierno de Biden dio santuario y protección a criminales peligrosos, muchos de ellos de “prisiones e instituciones mentales”. Sin embargo, no existen pruebas que respalden que el gobierno de Joe Biden haya implementado una política para proteger a inmigrantes considerados “criminales peligrosos”. Según cifras oficiales del año fiscal 2024, de las 271,484 deportaciones realizadas por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), 88,764 correspondieron a extranjeros que enfrentaban cargos o habían sido condenados por actividades criminales. Esto indica que, en realidad, una parte significativa de las deportaciones involucró a personas con antecedentes criminales.