La gigante tecnológica de Cupertino está ejecutando una audaz maniobra de reubicación productiva que podría cambiar para siempre el mapa global de fabricación de dispositivos electrónicos. Ante el tsunami arancelario desatado por la administración Trump, Apple ha puesto en marcha un plan de contingencia con India como protagonista principal, según revelan investigaciones de The Times of India y The Wall Street Journal.
La operación relámpago de los cinco vuelos
Mientras el reloj avanzaba inexorablemente hacia la implementación de los nuevos aranceles a finales de marzo de 2025, Apple orquestó una operación logística sin precedentes. En una carrera contra el tiempo, la compañía movilizó cinco aeronaves repletas de iPhones y otros productos manufacturados en territorio indio con rumbo a Estados Unidos.
Esta misión, ejecutada en un frenético período de 72 horas, constituye la respuesta inmediata de la empresa a la sobretasa del 10% impuesta por Trump sobre importaciones electrónicas. Fuentes gubernamentales indias confirman que esta estrategia permitió a Apple introducir mercancía "bajo un régimen arancelario más favorable", ganando tiempo precioso mientras se reconfigura su cadena de suministro global.
El objetivo no deja lugar a dudas: mantener el precio del iPhone intocable para el consumidor estadounidense, evitando así un potencial desplome en las ventas del producto estrella de la compañía.
La ventaja india: 28 puntos porcentuales de diferencia
Lo que comenzó hace años como una diversificación táctica se ha convertido ahora en un pilar estratégico fundamental. La nueva realidad arancelaria ha creado un diferencial económico imposible de ignorar: mientras los productos fabricados en China enfrentan un arancel asfixiante del 54%, aquellos ensamblados en India soportan un más manejable 26%.
Esta brecha de 28 puntos porcentuales ha precipitado la transformación de India en el nuevo epicentro productivo de Apple, hasta el punto que The Wall Street Journal proyecta que hasta la mitad de los iPhones destinados al mercado estadounidense podrían salir este año de líneas de producción indias.
La apuesta por India va más allá de una simple reubicación temporal. Apple ha intensificado sus inversiones en infraestructura local, estrechando lazos con Foxconn y otros fabricantes para establecer una robusta plataforma productiva centrada inicialmente en iPhones y AirPods, con vistas a una expansión futura.
Esta recalibración no solo protege los márgenes de beneficio de Apple frente a la nueva realidad arancelaria, sino que podría reconfigurará permanentemente los flujos comerciales tecnológicos entre Asia y América, marcando un antes y un después en la globalización del sector electrónico.