El gobierno de Venezuela inició este martes un nuevo despliegue militar de alcance nacional en respuesta a lo que califica como "amenazas imperiales" por parte de Estados Unidos, país que mantiene una operación naval y aérea en aguas del Caribe cercanas a su territorio.
El ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, detalló en un comunicado que el operativo —que se extenderá hasta este miércoles— incluye:
- Medios terrestres, aéreos, navales, fluviales y misilísticos
- Sistemas de armas y unidades militares regulares
- La Milicia Bolivariana y órganos de seguridad ciudadana
- Activación total de los Órganos de Dirección para la Defensa Integral en todos los estados y municipios
Contexto y escalada progresiva
Esta movilización corresponde a una "fase superior del Plan Independencia 200″, un dispositivo defensivo activado en septiembre pasado. Desde agosto, el gobierno venezolano ha impulsado:
- Movilizaciones populares
- Jornadas de alistamiento en la Milicia
- Adiestramientos para fortalecer la "fusión popular-militar-policial"
Posición venezolana frente al despliegue estadounidense
Caracas denuncia que la presencia militar de EE.UU. en el Caribe —la mayor desde la primera Guerra del Golfo (1990-1991), según expertos del CSIS— busca en realidad:
- Propiciar un "cambio de régimen"
- Imponer un gobierno "títere"
- Apropiarse de recursos naturales, especialmente petróleo
Estados Unidos justifica su operativo como parte de la lucha antidrogas, mientras Venezuela interpreta estas acciones como una escalada que amenaza su soberanía, en un contexto de tensiones bilaterales que se mantienen en niveles críticos.
