El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, abogó este sábado por la creación de un salario mínimo común para todos los países de la Unión Europea durante su intervención en el congreso del Partido Socialista Europeo, donde lanzó duras críticas contra la derecha tradicional por convertirse en "satélite de la ultraderecha" al copiar sus ideas y amenazar derechos sociales conquistados.
Ante centenares de representantes socialistas en Ámsterdam, Sánchez defendió reforzar el pilar social europeo con empleos dignos, protección de servicios públicos y transición energética, advirtiendo que "derechos que tardaron décadas en conseguirse están ahora amenazados". Afirmó que España no es una excepción en la deriva de la derecha hacia postulados extremos.
El líder socialista también pidió coherencia en la política exterior —"Todas las vidas tienen el mismo valor: en Ucrania, en Gaza"— y destacó los avances de España en energía renovable y crecimiento económico. Finalizó urgiendo a poner el foco europeo en la crisis de vivienda, igualdad de género y derechos laborales, en una clara apuesta por una agenda progresista para la UE.