La selección italiana de voleibol femenino escribió este domingo otra página dorada en su historia al proclamarse campeona del mundo por segunda vez, tras derrotar en una vibrante final a Turquía por 3-2 (25-23, 13-25, 26-24, 19-25, 15-8).
El título llega apenas un año después de que “La Nazionale” conquistara el oro en los Juegos Olímpicos de París 2024, convirtiéndose en la primera selección femenina en ostentar simultáneamente los títulos olímpico y mundial desde Cuba en 2002.
La gran figura fue Paola Egonu, autora de 22 puntos (incluidos tres bloqueos), acompañada por la dirección estratégica del entrenador argentino Julio Velasco, quien a sus 73 años suma otro éxito legendario tras haber guiado a la selección masculina de Italia a la cima en los años noventa.
Italia llegó a la final tras una épica remontada contra Brasil en semifinales (3-2), y volvió a demostrar temple en el tie-break frente a Turquía, vigente campeona de Europa y liderada por una imparable Melissa Vargas (28 puntos). En el set decisivo, las italianas se impusieron con autoridad gracias a su superioridad en el bloqueo (cinco puntos en ese parcial).
Con este triunfo, Italia suma ya cuatro grandes títulos internacionales en poco más de un año: dos Ligas de Naciones, el oro olímpico en París y ahora el Mundial. Además, mantiene una racha invicta de 35 partidos consecutivos en los últimos 15 meses, confirmándose como la potencia indiscutible del voleibol femenino actual.