La Comisión Europea impuso este viernes una multa récord de 2.950 millones de euros a Google, al acusar al gigante tecnológico de favorecerse a sí mismo en su herramienta de intercambio de anuncios AdX y consolidar su dominio en el mercado de publicidad digital.
Bruselas exige cambios inmediatos
“Google debe presentar ahora una solución seria para resolver sus conflictos de intereses y, si no lo hace, no dudaremos en imponerle fuertes medidas correctoras”, advirtió Teresa Ribera, comisaria de Competencia de la UE.
La empresa tiene 60 días para poner fin a las prácticas señaladas.
La investigación se inició en junio de 2021 y concluyó que Google utilizó su posición dominante como servidor de publicidad para editores y sus herramientas de compra de publicidad en perjuicio de la competencia.
Respuesta de Google
Lee-Anne Mulholland, vicepresidenta de Google, calificó la multa como “injustificada” y advirtió que las medidas exigidas “perjudicarán a miles de empresas europeas al dificultarles ganar dinero”. La compañía confirmó que apelará la decisión.
Un conflicto con dimensión geopolítica
La sanción llega en un contexto delicado de tensiones comerciales entre la UE y Estados Unidos. El presidente Donald Trump advirtió recientemente que podría imponer nuevos aranceles a Europa si Bruselas continuaba actuando contra las tecnológicas estadounidenses.
Según medios europeos, la decisión incluso fue pospuesta estratégicamente por la Comisión para evitar la reacción inmediata de Washington.
El caso ahora se suma a la lista de disputas que amenazan con enfriar la relación transatlántica, en momentos en que ambas potencias negocian la aplicación de un acuerdo comercial que aún no entra plenamente en vigor.
