El presidente estadounidense Donald Trump advirtió este viernes que Estados Unidos "no participará" en la mediación del conflicto entre Rusia y Ucrania si alguna de las partes "dificulta enormemente" un acuerdo de paz. Desde el Despacho Oval, Trump enfatizó su deseo de una resolución rápida, aunque evitó establecer un plazo específico.
"Estamos hablando de que la gente morirá. Idealmente, vamos a evitarlo", declaró el mandatario, añadiendo que si alguna parte obstaculiza las negociaciones, "simplemente les diremos: 'Son unos tontos, unos necios, son gente horrible', y simplemente lo ignoraremos".
Estas declaraciones llegan un día después de que el secretario de Estado, Marco Rubio, estableciera un ultimátum más concreto, advirtiendo que Washington abandonaría sus esfuerzos de mediación "en cuestión de días" sin señales claras de progreso. "No vamos a continuar con estos esfuerzos durante semanas y meses", afirmó Rubio, subrayando que Estados Unidos tiene "otras prioridades en las que centrarse".
Paralelamente, el jueves se firmó un memorando de intención entre Ucrania y Estados Unidos que le daría a Washington acceso a los recursos minerales ucranianos. El documento, que debe finalizarse antes del 26 de abril, también contempla la creación de un fondo de inversión para la reconstrucción del país devastado por la guerra.
Aunque el memorando no especifica los recursos naturales involucrados, filtraciones sugieren que el acuerdo abarcaría no solo minerales raros sino también control estadounidense sobre infraestructura energética, petróleo y gas ucranianos. Kyiv estima poseer aproximadamente el 5% de las "materias primas críticas" mundiales, incluyendo el 7% de los suministros europeos de titanio, un tercio de los yacimientos de litio en Europa, además de berilio y uranio.
La ministra de Economía ucraniana, Yulia Svyrydenko, anunció la firma del documento en redes sociales, compartiendo imágenes de ella y del secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, formalizando el acuerdo por separado.
El presidente Volodymyr Zelensky había intentado utilizar estas negociaciones para asegurar garantías de seguridad estadounidenses en caso de un alto al fuego con Rusia, pero sus expectativas se vieron frustradas tras un tenso encuentro con Trump en febrero.