El expresidente brasileño Jair Bolsonaro ha sido condenado a 27 años y tres meses de prisión tras ser declarado culpable de intentar un golpe de Estado para mantenerse en el poder después de perder las elecciones de 2022 frente a Luiz Inácio Lula da Silva.
La mayoría del panel de jueces del Supremo Tribunal Federal votó en su contra: cuatro de cinco magistrados lo declararon culpable, mientras que uno votó por absolverlo. Bolsonaro, de 70 años, cumple arresto domiciliario y ha negado cualquier delito; su defensa apelará el fallo ante el pleno del Supremo, compuesto por 11 jueces.
El juicio ha generado división social y política en Brasil, con manifestaciones de apoyo y rechazo al exmandatario. Además, la situación ha generado repercusiones internacionales: el presidente estadounidense Donald Trump vinculó la imposición de un arancel del 50% a productos brasileños con el proceso judicial de Bolsonaro, calificándolo de "caza de brujas".
A pesar de su condena, Bolsonaro sigue siendo una figura influyente y se espera que elegirá un heredero político que podría desafiar a Lula en las próximas elecciones. El fallo también podría motivar a sus aliados legislativos a buscar alguna forma de amnistía a través del Congreso.
