La jueza Fátima Veloz impuso medidas de coerción contra los hermanos Antonio y Maribel Espaillat, imputados por su presunta vinculación con actividades ilícitas relacionadas al centro de entretenimiento Jet Set.
Tras más de 12 horas de audiencia, el tribunal del Distrito Nacional ordenó una garantía económica de 50 millones de pesos para cada uno, presentación periódica e impedimento de salida del país.
Aunque el Ministerio Público había solicitado prisión preventiva, la jueza optó por medidas menos gravosas, considerando las condiciones personales de los imputados y los argumentos presentados por su defensa.