Un alarmante panorama sobre la violencia sexual en República Dominicana ha quedado al descubierto tras la publicación de la segunda Encuesta Nacional sobre Agresiones Sexuales contra las Mujeres. El estudio, desarrollado por el Centro de Investigación para la Acción Femenina (CIPAF) en colaboración con AGARESO y el Grupo Arista SRL, revela que casi la mitad de las mujeres encuestadas ha sido víctima de alguna forma de agresión sexual, mientras persisten graves obstáculos para su denuncia y reconocimiento.
Según los resultados de la investigación, el 44% de las participantes reportó haber experimentado algún tipo de agresión sexual a lo largo de su vida. Sin embargo, el dato más preocupante es que solo el 16.5% de estas víctimas formalizó una denuncia ante las autoridades competentes.
Esta significativa brecha entre la incidencia y la denuncia formal podría explicarse por otro hallazgo inquietante: apenas el 18.8% de las víctimas reconoció lo vivido como una agresión en el momento en que ocurrió. Este dato sugiere profundas deficiencias en la educación sobre consentimiento y derechos sexuales, así como la posible normalización de ciertas conductas abusivas en la sociedad dominicana.
La situación se torna aún más compleja cuando las agresiones ocurren durante la infancia. El estudio señala que en el 53.8% de los casos en que las agresiones se produjeron siendo las víctimas menores de edad, sus padres o tutores nunca fueron informados sobre lo sucedido. Este alto porcentaje evidencia las barreras de comunicación familiar y los tabúes que rodean la violencia sexual, dejando a muchas niñas y adolescentes sin el apoyo necesario para procesar y denunciar estos traumáticos eventos.
Los resultados de esta encuesta ponen de manifiesto la necesidad urgente de implementar políticas públicas más efectivas para la prevención de la violencia sexual, mejorar los mecanismos de denuncia y fortalecer los sistemas de apoyo a las víctimas en la República Dominicana.