Según los especialistas, dormir con el cabello húmedo no es una práctica recomendable debido a varios efectos negativos que puede tener tanto en el pelo como en el cuero cabelludo.
Daños en la estructura capilar
De acuerdo con la Dra. María Álvarez, dermatóloga del Hospital Universitario de Madrid, el cabello mojado es considerablemente más frágil y susceptible a daños. Esto ocurre porque la humedad provoca que las cutículas capilares se abran, dejando el cabello más vulnerable a roturas y quiebres.
Durante el sueño, la fricción constante entre el cabello húmedo y la almohada puede ocasionar:
- Mayor tendencia a enredarse
- Aumento de la fragilidad y roturas
- Pérdida del brillo natural
- Deterioro progresivo de la estructura capilar
Riesgos para la salud del cuero cabelludo
La humedad prolongada en el cuero cabelludo crea un ambiente propicio para el desarrollo de microorganismos. Los expertos advierten que esta condición puede favorecer:
- Crecimiento de hongos y bacterias
- Desarrollo de dermatitis seborreica
- Infecciones fúngicas que pueden causar picazón, enrojecimiento y descamación
- Desequilibrios en la flora natural del cuero cabelludo
Estos problemas tienen mayor probabilidad de aparecer cuando dormir con el cabello mojado se convierte en un hábito frecuente.
¿Puede causar resfriados?
Respecto a la creencia popular de que dormir con el pelo húmedo puede provocar resfriados o dolores de cabeza, los especialistas del Hospital Clínico San Carlos aclaran que no existe una relación causal directa. Los resfriados son causados exclusivamente por virus, no por la humedad del cabello.
Sin embargo, señalan que la sensación de frío localizada en la cabeza debido a la humedad puede:
- Interferir con la calidad del sueño
- Provocar dolores de cabeza en personas sensibles a cambios de temperatura
- Generar malestar general durante el descanso
Recomendaciones si no puedes evitarlo
Para quienes por cuestiones de tiempo o rutina necesitan lavarse el cabello por la noche, los expertos sugieren:
- Usar una toalla de microfibra para absorber el exceso de humedad
- Aplicar el secador en modo frío o temperatura baja para minimizar daños
- Asegurarse de que el cabello esté al menos 70-80% seco antes de acostarse
- Considerar el uso de fundas de almohada de seda o satén que reducen la fricción
Estas prácticas pueden ayudar a minimizar los riesgos asociados con dormir con el cabello húmedo cuando no es posible secarlo completamente.